¿Qué es el Lipoláser?
El Lipoláser consiste en una Liposucción Mínimamente Invasiva. Se trata de una técnica que lleva poco más de una década realizándose y que consigue grandes resultados a la hora de reducir o eliminar grasa logrando una recuperación muy rápida.
Con esta técnica se consigue eliminar grasa, moldear el cuerpo y reducir la Celulitis o “piel de naranja” de manera totalmente no invasiva, a través de la aplicación de energía Láser mediante ondas precisas.
¿Por qué se realiza un Lipoláser?
La gran ventaja de este procedimiento es que se trata de un método no invasivo que permite al paciente ser tratado en menos de tres horas y que permite una reincorporación inmediata a su vida cotidiana.
Permite tratar zonas donde existe flacidez tales como la cara, papada, muslos o brazos, aunque se puede aplicar en muchas otras zonas del cuerpo.
Es un tratamiento que permite mantener al paciente sus actividades y que permite observar los resultados desde la primera sesión, aunque estos son acumulativos.
¿En qué consiste un Lipoláser?
El sistema utilizado se trata de un Láser de baja frecuencia que consigue bioestimular de manera inteligente las células adiposas para que dejen de generar contenido.
A diferencia de otros tratamientos, la técnica del Lipoláser consiste en realizar una pequeña incisión sobre la zona seleccionada e introducir una cánula diminuta, que, en su terminación final, estará dotada de una guía luminosa de fibra óptica que permite recorrer los tejidos sin dañar aquellos no deseados, a la vez que se reconstruyen los vasos sanguíneos.
De este modo, la energía Láser que se libera a través del extremo de la fibra va diluyendo la grasa, convirtiéndola en líquido que se puede aspirar a través de la cánula o se puede eliminar de manera natural en el organismo.
Preparación previa a un Lipoláser
La preparación de un Lipoláser no dista mucho de una preparación para una intervención quirúrgica.
Así, en primer lugar, se realizará un examen médico para detectar posibles anomalías, y tras una exploración física se decidirá si el tratamiento es o no adecuado para dicho paciente.
Cuidados tras la intervención
El posoperatorio es mínimo. En principio, se aconseja que se utilice una faja durante las primeras dos semanas y el paciente podrá hacer vida normal a los dos o tres días.
¿A qué especialista acudir?
El Cirujano Plástico es el especialista en la valoración del paciente y la ejecución de esta técnica.