Linfología

La Linfología es una rama de la medicina que puede tratar el linfedema, diagnosticando, siguiendo y terminando el tratamiento para esta enfermedad.

¿Qué es?

Es la disciplina médica que se encarga de estudiar el Linfedema, un padecimiento que detiene la circulación de la linfa, la cual es un líquido transparente que circula por el sistema linfático y transporta células que ayudan a combatir las infecciones y otras enfermedades.

¿Cuáles son las causas?

La linfología trata el linfedema en sus dos formas:

• Linfedema primario: Afecciones propias del sistema linfático que por lo general son congénitas o de nacimiento
• Linfedema secundario: la causa más frecuente y esta asociado a otros padecimientos que pueden afectar el sistema linfático, tales como cirugías, cáncer, radioterapia, infecciones, entre otras

Síntomas

Se distinguen 4 etapas del linfedema:

• Estadíos 0: es la etapa más temprana
• Estadío 1: es reversible
• Estadío 2: aún es reversible, la piel inicia engrosándose y tomar un color más obscuro
• Estadío 3: en este punto ya es irreversible, con piel dura y coloración obscura e inflamación

¿Cómo se realiza el diagnóstico?

Se puede identificar si hay un linfedema y tratarlo mediante la linfología a partir de un historial clínico, además de un examen físico, la medición de volumen de la zona afectada.

Tratamiento

Se debe realizar un tratamiento multidisciplinario con diversas especialidades:

• Rehabilitación Médica
• Fisioterapia
• Medicina Interna
• Cirugía Vascular
• Dermatología
• Psicología
• Ortopedia
• Pediatría
• Endocrinología
• Medicina Nuclear
• Radiodiagnóstico

En principio se busca reducir el edema tratante mediante otros tratamientos como el Drenaje Linfático Manual, presoterapia o vendaje multicapa para así tener un seguimiento con uso de prendas de compresión, vendajes nocturnos, ejercicio y cuidados en la piel.

¿Con qué especialista acudir?

Los linfólogos son los especialistas en esta área que pueden llevar a cabo el tratamiento de linfología ya que se encargan tanto del diagnóstico, el trato de la patología y de trastornos que puedan derivar de este problema, además de derivar al paciente a los diferentes especialistas necesarios para una correcta recuperación.