Hipermetropía
La Hipermetropía es un error del enfoque visual que generalmente se manifiesta con una visión borrosa e incómoda de cerca. La imagen se enfoca detrás de la retina y no directamente sobre ella, esto se debe a que el ojo es más corto de lo habitual o que la potencia óptica del cristalino y de la córnea es menor de lo normal.
Cuando nacemos, todos somos hipermétropes, cuando crecemos se va desarrollando nuestro cuerpo, incluidos nuestros ojos. Si el crecimiento del ojo, es menor de lo necesario, ese ojo será hipermétrope siempre, a no ser que se corrija más adelante tras previa valoración del Oftalmólogo.
Síntomas de la Hipermetropía
Los síntomas que pueden sufrir los pacientes con Hipermetropía son los siguientes:
- Visión borrosa
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Fatiga ocular o Astenopatía, suele aparecer en personas con Hipermetropía que realizan durante un tiempo prolongado actividades que requieren estar delante de un ordenador, habitualmente con mala iluminación y/o con agotamiento físico o psíquico produciendo por tanto molestias visuales.
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Dolor de cabeza, preferentemente en la región frontal al final del día tras el sobresfuerzo de acomodación del ojo por enfocar. La elevada intensidad de la cefalea puede provocar náuseas y Vómitos.
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Estrabismo Convergente, esto es cuando el ojo se desvía hacia el centro, puede aparecer en alguna ocasión vinculado a personas con Hipermetropía. Como consecuencia de cuando el objeto llega borroso a nuestro cerebro, involuntariamente nuestro Sistema Nervioso busca acomodar los ojos para enfocar correctamente.
Tratamiento para la Hipermetropía
El tratamiento de la hipermetropía depende de cada caso, y aunque no se cura, puede corregirse. La corrección con gafas o lentillas es la forma más simple de corregir la Hipermetropía.
La Cirugía Refractiva Láser es otra opción, la técnica LASIK es la más utilizada en las operaciones de Hipermetropía por su probada seguridad y eficacia.
En casos seleccionados existen otras técnicas quirúrgicas como el implante de Lentes Intraoculares Fáquicas (sin quitar el cristalino) o la extracción del cristalino con implante de una Lente Intraocular.
¿Cuándo acudir al Oftalmólogo?
Es importante realizar visitas periódicas al Oftalmólogo para controlar su evolución. Es conveniente realizar una revisión ocular anual, especialmente en la infancia y en personas mayores de 40 años, debido a los cambios fisiológicos normales que se producen con la edad.