Enfermedad de Lyme

¿Qué es la Enfermedad de Lyme?

Es una infección bacteriana que se produce a través de la picadura de una garrapata infectada. Es importante diagnosticar y tratar la enfermedad lo más rápido posible, para evitar que derive en serias complicaciones.

Es más probable padecer la enfermedad si se visitan zonas boscosas o con hierbas dónde habiten garrapatas que puedan transmitir la infección, por lo que es importante seguir una serie de consejos de prevención.

Pronóstico de la Enfermedad de Lyme

La enfermedad puede ser muy agresiva en el momento en que afecta al organismo, puesto que se extiende por el Sistema Osteoarticular y el Sistema Nervioso.

En otros pacientes, es posible tratarse mediante antibióticos si detecta con tiempo, para evitar distintas complicaciones como la Artritis, problemas de memoria o la Inflamación de la Médula Espinal, entre otros.

Síntomas de la Enfermedad de Lyme

La principal sintomatología de la Enfermedad de Lyme puede empezar a partir del tercer día o hasta un mes después de la picada de la garrapata.

Los síntomas más frecuentes son los siguientes:

• Sarpullido rojo conocido como eritema migratorio
• Fiebre o Escalofríos
• Dolor Articular y Muscular
• Inflamación de los Ganglios Linfáticos
• Dolor de Cabeza
• Dificultades para hablar

Si dicha infección no se trata puede llegar a expandirse por el organismo (articulaciones, corazón y sistema nervioso). En este caso, los síntomas pueden empeorar:

• Dolor de los Nervios
• Dolores punzantes
• Artritis
• Parálisis Facial, en uno o ambos lados de la cara
• Palpitación irregular del corazón
• Fuerte Dolor de Cabeza
• Sarpullidos en diversas áreas del cuerpo
• Mareos
• Cerebro o médula espinal inflamada
• Dificultad para respirar

Pruebas médicas para la Enfermedad de Lyme

El especialista primeramente valorará los síntomas presentados y averiguará si el paciente se ha encontrado en zonas de riesgo con garrapatas, puesto que hay otras patologías que pueden presentar un cuadro médico similar.

En muchos casos se detecta a partir de un Análisis de Laboratorio, que determina si el paciente tiene anticuerpos de la Enfermedad de Lyme. Es posible que la prueba deba repetirse, puesto que si la infección es reciente el cuerpo no habrá tenido de producir dichos anticuerpos.

¿Cuáles son las causas de la Enfermedad de Lyme?

La enfermedad es causada por una bacteria que se propaga mediante la picadura de una garrapata infectada, normalmente por las llamadas garrapatas de patas negras o de venado.

Las garrapatas consiguen adherirse al cuerpo de las personas y, en muchos casos, en zonas escondidas como las axilas o el cabello. Para transmitir la enfermedad, normalmente deben estar adheridas durante unas 36 horas.  

¿Se puede prevenir?

Para prevenir la infección es importante minimizar el riesgo de ser picado por una garrapata. Por ello es importante seguir los siguientes consejos:

• Usar repelente con DEET
• Llevar ropa de manga larga y protectora, preferiblemente con colores claros para poder visualizar una posible garrapata adherida
• Llevar la camisa dentro de los pantalones, así como los pantalones en los calcetines
• Evitar las zonas habitadas por garrapatas. En caso de entrar en un bosque, seguir los senderos
• Una vez acabada una excursión, ducharse y lavar la ropa lo más rápido posible
• Hacer una revisión diaria para buscar posibles garrapatas

Tratamientos para la Enfermedad de Lyme

El tratamiento para la enfermedad es por medio de antibióticos y, como se ha mencionado, es importante empezarlo lo más pronto posible. De este modo, hay más probabilidades de una rápida recuperación.

En pacientes que ven afectados su sistema nervioso central, suele administrarse el antibiótico por vía intravenosa, con un tratamiento de una duración de entre dos y cuatro semanas.

Una vez terminado el tratamiento, existen casos en los que todavía hay algunos síntomas de dolor o fatiga, que puede durar hasta seis meses más. Esto se conoce como el “Síndrome Postratamiento de Lyme”.

Especialista

La Enfermedad de Lyme, debe ser diagnosticada y tratada inicialmente por un Médico de Familia.