Tres apuntes rápidos sobre el Labio Leporino
El Labio Leporino y el Paladar Hendido son Malformaciones Congénitas. Embriológicamente, el labio y el paladar se forman independientemente en el feto. Por tanto, podemos encontrar ambas malformaciones por separado o conjuntamente
El Labio Leporino y el Paladar Hendido son Malformaciones Congénitas, sin que esto suponga que son necesariamente hereditarias. Esto quiere decir que el bebé nace con la Malformación, pues ésta se produce durante el desarrollo embrionario, pero su desarrollo no necesariamente obedece a factores de herencia, sino que puede obedecer también a otras causas. Por ejemplo, pueden ser factores ambientales, como cuando un Tumor durante el embarazo presiona al bebé, alterando su correcta formación. También se ha observado correlación entre la edad de la madre y una mayor incidencia de la aparición de estas, además de la toma de medicamentos como antiepilépticos con una mayor probabilidad de su aparición.
¿Qué tipo de problemas causa en el paciente?
Los problemas que causan estas alteraciones en la morfología del bebé son múltiples y variados dependiendo del caso en particular. Pueden observarse alteraciones en la mordida, alteraciones en los dientes como Maloclusiones y Apiñamientos, en la forma, el número, una mayor incidencia de caries, alteraciones en el contorno facial y la forma en que crecen los maxilares. En otros aspectos de la salud se pueden presentar pérdidas de audición, un habla más nasal, falta de aire al hablar y respiración oral que puede impactar en la posición corporal y, a la larga, dar problemas en la columna vertebral.
¿En qué consiste el tratamiento?
Los tratamientos para el Labio Leporino y las Fisuras Labio-palatinas requieren la colaboración de un equipo multidisciplinar. En el centro de este equipo multidisciplinar se encuentra el paciente y su familia, que son quienes toman las decisiones, pero deben escuchar a los profesionales de la salud que son, al fin y al cabo, los que tienen los conocimientos científicos.
La dirección del equipo va a recaer sobre los cirujanos que son los que toman las decisiones más arriesgadas sobre la salud del paciente. Los especialistas que van a conformar el equipo son los otorrinolaringólogos, logopedas, osteópatas, ortodoncistas y cirujanos pediátricos.