Tratamiento Multidisciplinar: Ortodoncia y Cirugía Ortognática
La Cirugía Ortognática es una subespecialidad de la Cirugía Maxilofacial que se combina con la Ortodoncia para corregir las malformaciones de los maxilares proporcionando una buena función masticatoria y una correcta estética facial
Las deformidades dento faciales aparecen cuando uno o varios huesos que componen la cara no se corresponden entre sí en tamaño, forma y/o posición, proporcionando un crecimiento anormal, posibles Asimetrías Faciales y mal encaje dental, que afecta a la función masticatoria e incluso pueden provocar dolores musculares y articulares.
Muchas de estas alteraciones tienen lugar durante la edad de crecimiento y suelen estabilizarse en la edad adulta. Cualquier hueso facial puede verse afectado por estas alteraciones, dando lugar a una falta de armonía funcional y estética de la cara que puede condicionar la personalidad, incluso influir en el carácter y autoestima de la persona.
Casos en que se utiliza esta técnica
La Cirugía Ortognática va dirigida a los pacientes adultos, que han finalizado el crecimiento por completo, con problemas esqueléticos severos que les impiden masticar bien o desean mejorar su aspecto facial. El objetivo de la Cirugía Ortognática es colocar los huesos en su posición adecuada, restablecer la función masticatoria y mejorar la estética facial después del tratamiento ortodóntico inicial o pre-quirúrgico que realiza el ortodoncista. Existen condiciones que pueden indicar la necesidad de la cirugía ortognática, como la dificultad para masticar, dolor crónico de la ATM, respiración bucal crónica y boca seca, apnea del sueño, mandíbula con prognatismo, o desproporción entre los tercios faciales y desequilibrio facial.
Beneficios y riesgos
La Cirugía Ortognática mueve los dientes y los maxilares en posiciones más equilibradas, funcionales y saludables respecto a otras técnicas. Además de una mejora en la función y mordida, muchos pacientes consiguen mejorar su aspecto facial, respiración y habla. Los resultados de la cirugía pueden tener un efecto muy positivo en muchos aspectos de la vida, y es probable que la autoestima y confianza aumenten considerablemente.
Los riesgos de la cirugía podrían ser: la inflamación, el entumecimiento temporal o sensación de hormigueo, o un riesgo de infección común en toda operación. La limitación del movimiento de la mandíbula es otro posible problema, por lo que es muy importante seguir los ejercicios que propone el ortodoncista tras la cirugía.