Rinoplastia: ¿Cuántos tipos de Rinoplastia existen?
Cada nariz debe adaptarse a las características únicas de la persona, considerando elementos como cejas, ojos, boca y mentón.
Tipos de Rinoplastia
La Rinoplastia, un procedimiento quirúrgico centrado en corregir problemas estéticos de la nariz, se destaca por su capacidad para transformar y embellecer este rasgo facial, sin embargo, su alcance va más allá, buscando una armonización con otros elementos faciales como cejas, ojos, mentón y boca. Un objetivo adicional es mejorar la funcionalidad nasal para asegurar una respiración óptima del paciente.
En términos generales, existen dos tipos de Rinoplastia, diferenciadas principalmente por la vía de abordaje utilizada. La primera es la Rinoplastia abierta, que implica realizar una incisión en la columela, elevando todos los tejidos necesarios para llevar a cabo las modificaciones internas. Aunque efectiva, esta técnica deja una cicatriz potencial y requiere la extracción de puntos alrededor del octavo día.
La segunda opción es la Rinoplastia cerrada, una técnica donde no se realizan incisiones externas, evitando cicatrices visibles. Todas las modificaciones se llevan a cabo a través de pequeñas aberturas en la nariz. Esta técnica es viable para la mayoría de los pacientes y presenta la ventaja de no dejar marcas externas.
Personalización y armonización facial
La Rinoplastia va más allá de simplemente embellecer la nariz; se trata de una personalización minuciosa. Cada nariz debe adaptarse a las características únicas de la persona, considerando elementos como cejas, ojos, boca y mentón. La armonización con la totalidad de la cara es crucial para obtener resultados naturales y equilibrados.
Funcionalidad nasal
Uno de los aspectos más significativos de la Rinoplastia es la mejora en la funcionalidad nasal, además de lograr una estética agradable, la intervención busca garantizar que el paciente respire de manera óptima. Este aspecto funcional es esencial para la calidad de vida del paciente, haciendo hincapié en la importancia de una respiración mejorada como resultado final.