Reemplazo Articular de Rodilla y Cadera, para mejorar la calidad de vida
La Cirugía de Reemplazo Articular tiene como objetivo principal aliviar el dolor de una articulación severamente lesionada, intentando preservar la mejor funcionalidad
Este procedimiento se realiza cuando todas las intervenciones terapéuticas de salvamento de la articulación han fracasado y consiste básicamente en retirar el cartílago y parte del hueso lesionado para ser reemplazado por componentes metálicos, plásticos e incluso de cerámica.
Causas más comunes de desgaste de articulaciones
La principal causa de desgaste de una articulación son las deformidades articulares propias del paciente que, influenciadas por otros factores de riesgo como Obesidad, ejercicio excesivo de alto impacto sin asesoramiento y movimientos repetitivos de una articulación, van a producir un desgaste acelerado de la misma. Otras causas son el trauma severo de una articulación y las Enfermedades Metabólicas o Autoinmunes que afectan las articulaciones.
En términos generales, todo paciente con edad esquelética madura (que haya finalizado su crecimiento), que presente un daño articular irreversible, en el cual los diferentes tratamientos para mejorar el dolor y la funcionalidad de la articulación lesionada hayan fracasado, es candidato a una Cirugía de Remplazo Articular.
Existen algunas excepciones en pacientes pediátricos de esqueleto inmaduro con daño articular severo, secundario a una enfermedad oncológica, en donde es posible plantear un Reemplazo Articular especial.
Formas de prevenir el desgaste acelerado y conservar por mayor tiempo la salud de las articulaciones
Es muy importante conocer el estado de nuestras articulaciones mediante una consulta con el ortopedista, en donde se valorará el riesgo de desgaste acelerado de una articulación de acuerdo con el estado actual de la misma, estado de peso y la carga genética del paciente.
Otro aspecto importante a tener en cuenta es el tipo de actividad física a la que se someta la articulación, si bien sabemos que el ejercicio excesivo de alto impacto sin asesoramiento y movimientos repetitivos de una articulación nos van a producir un desgaste acelerado de la misma, también sabemos que la disminución de los niveles de actividad física podrían contribuir con la aparición de Osteoartrosis al generar articulaciones más débiles e inestables, que sean menos resistentes al desgaste.
Por lo cual debemos encontrar un balance que le permita al paciente realizar actividad física asesorada sin poner en riesgo sus articulaciones.
La vida después de un Reemplazo Articular
Un paciente que fue sometido a una Cirugía de Reemplazo Articular con éxito, puede retomar una vida normal, que le permita hacer las actividades que se encontraban afectadas antes del reemplazo. Incluso puede retomar actividad física regular después de una fase de rehabilitación controlada. Es importante aclarar que la actividad física a iniciar debe ser supervisada con el fin de no comprometer la vida útil del reemplazo articular.