Otitis Aguda en Pediatría
Causas y tipos de otitis
La Otitis Media Aguda (OMA) es la infección supurada del oído medio, que tiene un inicio súbito y de corta duración; asimismo, denota inflamación de la cubierta mucoperióstica del oído medio. La membrana timpánica (MT) inflamada se presenta opacificada, protuyente o con ambas características.
Según su tiempo de evolución, los Especialistas subdividen la enfermedad en: a) aguda, cuando el proceso dura no más de tres semanas; b) subaguda, cuando la infección perdura de tres semanas a tres meses; y c) crónica, cuando la enfermedad se prolonga durante más de tres meses.
El oído medio es parte de un sistema formado por la nasofaringe, la trompa de Eustaquio y la mastoides, estructuras que se encuentran recubiertas de epitelio respiratorio que contiene células ciliadas, secretorias de moco e inmunoglobulinas. Entre las funciones del oído se incluyen la ventilación y el equilibrio de las presiones atmosféricas, así como la protección ante el sonido y el drenaje de secreciones a la nasofaringe. Cuando estos mecanismos se alteran, contribuyen a la proliferación bacteriana, lo que desencadena la infección. La obstrucción tubaria también inhibe el drenaje del líquido del oído medio a la nasofaringe, lo que contribuye al desarrollo de la infección.
Cifras sobre la Otitis
La Otitis es un problema mundial de salud que afecta a uno de cada cuatro niños menores de 10 años y es la infección bacteriana más frecuente en niños menores de cinco años, de tal modo que constituye una de las causas más comunes de consulta médica pediátrica. De 25 a 40% de las visitas pediátricas en menores de cinco años son por OMA, mientras que en la edad adulta este padecimiento es raro.
Hay estudios que indican que 80% de los preescolares menores de tres años han tenido cuando menos un episodio de Otitis Media, y que aproximadamente 46%, tres o más episodios; se menciona que mientras más temprana es la presentación del episodio, existe un mayor riesgo de padecer Otitis Media Crónica o recurrente.
Se ha observado que los pacientes con defectos estructurales o del desarrollo craneofacial tienen más episodios de OMA, aunados a procesos inflamatorios de las vías aéreas superiores (alergia o infección) y a hábitos inadecuados como lactancia en decúbito, sonarse en forma incorrecta, sumergirse en el agua inapropiadamente o en mal estado de salud cuando se practica la natación.
Síntomas y diagnóstico
Casi todos los casos de OMA se presentan como un cuadro de Coriza, Rinitis, Fiebre, Tos, Irritabilidad y Anorexia. El síntoma más fidedigno es la Otalgia. Los niños muy pequeños no verbalizan el dolor, pero se jalan las orejas o rehúsan deglutir y lloran constantemente. Debe sospecharse cuando el dolor despierta a los niños por las noches.
El diagnóstico de OMA debe incluir una adecuada historia clínica y un examen físico completo, con énfasis en la inspección del oído medio, lo que sólo puede obtenerse mediante el uso de un Otoneumatoscopio con Perilla.
La Otoneumatoscopía debe realizarse de manera que el conducto auditivo externo se encuentre libre para visualizar correctamente la membrana timpánica y valorar su movilidad, los cambios de coloración y vascularización, así como la presencia de niveles hidroaéreos por detrás de la misma.
La exploración clínica debe realizarse con un máximo de suavidad y cuidado, tanto para evitar dolor y mayor Ansiedad en el paciente, como para permitir la observación de cualquier cambio de estructuras por pequeño que éste sea; debe usarse un otoscopio neumático con luz intensa y amplificación suficiente. La exploración física no es sencilla en pacientes pediátricos, motivo por el cual debe tenerse paciencia y habilidad adquirida a lo largo del tiempo para realizarla.
Tratamiento y complicaciones
La Otitis Media Aguda es considerada como un problema clínico que requiere de una estrategia adecuada en el manejo y la elección de los antibióticos, ya que su etiología es multifactorial y es difícil diferenciar entre causas bacterianas, virales o no infecciosas.
Es importante hacer notar que existen pocas herramientas que ayuden al Pediatra para formular una estrategia adecuada de tratamiento; sin embargo, en recientes revisiones se ha observado que el uso temprano de la terapia antibiótica mejora el curso clínico de la OMA, disminuyendo la sintomatología y la incidencia de complicaciones.
El manejo conservador recomienda 10 días de antibioticoterapia, aunque algunos estudios han tenido resultados aceptables con 5-7 días de tratamiento. Cuando un paciente no mejora después de 72 horas de manejo con amoxicilina se debe cambiar el antibiótico. Otras terapéuticas recomendables son: analgésicos, antipiréticos y descongestionantes.
La Pérdida Auditiva es la complicación más común, ya que prácticamente todos los niños que cursan con derrame en el oído medio presentan una pérdida conductiva o neurosensorial que va de 15 a 50 db. También se puede presentar perforación de la membrana timpánica, parálisis facial, Meningitis, entre otras complicaciones.