¿Ortodoncia Acelerada?
Los tratamientos de Ortodoncia ahora pueden realizarse en mucho menos tiempo que con la técnica clásica, y la Ortodoncia acelerada nos brinda además más posibilidades de corrección
La Ortodoncia que empezó siendo un tratamiento de niños, está relacionada con duraciones entorno a los dos años. Eso se debe a que se aprovecha una edad de los niños en la que se producen los cambios que llevan de la niñez a la edad adulta. En este período de pubertad, además de completarse el recambio de los dientes, se produce la maduración del esqueleto óseo de la boca y casi se completa todo el crecimiento de los maxilares. Es por esos cambios que el ortodontista tiene una oportunidad de oro para influir positivamente en el proceso, ayudando a que estos cambios de desarrollo se produzcan de un modo óptimo. Cuando hablamos de la duración de un tratamiento de estas características, se ve lógico que el tratamiento dure aproximadamente el mismo tiempo que dura esta transformación del cuerpo, es decir de 18 a 24 meses.
Hay, por supuesto, más factores a tener en cuenta, y uno muy decisivo por el grado de su influencia es el tipo de tejido óseo que rodea a las raíces de los dientes y la naturaleza de la unión de éstos con el hueso que les da soporte. Este tejido poco a poco recambia sus células y la sustancia ósea que lo compone, en un equilibrio dinámico entre reabsorción y reposición ósea. Esta propiedad es la que se aprovecha para forzar de algún modo los dientes a una posición más ideal, e influye en la duración del tratamiento ya que tiene su velocidad natural que no puede ser alterada por la presión del aparato de Ortodoncia.
Los ortodontistas han desarrollado aparatos que son aplicables a los pacientes adultos y muchas personas que buscan resultados de calidad en la rehabilitación de su boca se han lanzado a ponerse aparatos.
La ortodoncia acelerada, porque se puede acortar el tiempo de tratamiento significativamente, con una relativamente inocua intervención quirúrgica, que puede llegar a acelerar el tiempo de tratamiento hasta un tercio de su duración, y en vez de 18 a 24 meses, poder proponer duraciones de tratamiento entorno a los 6 a 12 meses, con los mismos o mejores resultados.