Los Factores de Crecimiento aceleran la recuperación
Los Factores de Crecimiento son proteínas, derivadas de las plaquetas, que se encuentran en la sangre y que se activan de forma natural ante la presencia de tejidos lesionados
La utilización que puede hacerse es la de aplicarlos en tejidos con lesiones tanto agudas como crónicas que por sí mismas les cuesta recuperar o para darle mayor rapidez en su proceso de curación.
Las lesiones ligamentosas son uno de los escenarios donde su aplicación muestra grandes posibilidades. Cuando se aplican los Factores de Crecimiento plasmáticos en ligamentos lesionados, hay una mayor rapidez en la regeneración de dichos tejidos, pudiendo acelerar los tiempos de recuperación de lesiones que clásicamente dejan fuera del deporte, del trabajo o de la vida cotidiana a muchos pacientes.
No se trata tanto de obtener mejores resultados con este tratamiento sino, una aceleración del resultado final. La gran ventaja es que, en casos en los que la regeneración podría no llegar a ser completa, el uso repetido de infiltraciones con plasma rico en factores de crecimiento sí puede contribuir de forma decisiva a la reconstitución de dichos tejidos.
Amplio potencial
En principio, todas las lesiones ligamentosas pueden beneficiarse del efecto de los Factores de Crecimiento, pero siempre y cuando existan fibras ligamentosas sobre las cuales se pueda actuar. No tiene sentido utilizarlas en casos de rupturas crónicas de ligamento cruzado anterior en las que no existan fibras, pero sí en las roturas del mismo ligamento si existen restos suficientes y con tensión adecuada. En este escenario, los factores pueden contribuir a una mayor estabilidad y por tanto una recuperación mucho más rápida.
En los casos agudos se aplica en forma líquida para infiltración sobre la zona lesionada en unos tiempos precoces, repitiendo la infiltración si lo requiere al cabo de una semana. Para realizarlo de esta forma, hay que controlar al paciente para ir observando la velocidad de regeneración: si con una sola infiltración podemos dar estabilidad a una articulación porque regenera el ligamento, no pinchamos más veces ya que habremos conseguido nuestros objetivos de dar estabilidad, reducir la inflamación y el dolor de la zona afectada.
Además, en cirugías de reconstrucción del ligamento cruzado anterior es una práctica habitual usar factores de crecimiento, puesto que han demostrado una aceleración en los tiempos de recuperación de los pacientes y, además, se traduce en la precoz reincorporación a la práctica deportiva.
Beneficioso para los deportistas
De hecho, estos tratamientos son especialmente adecuados en el área deportiva por su rapidez. Es evidente que los deportistas tienen un interés especial no sólo en recuperarse de sus lesiones, como cualquier otro paciente, sino en hacerlo en un mínimo tiempo posible para conseguir una reincorporación deportiva precoz. Por ello, los Factores de Crecimiento son un instrumento muy válido para acelerar las reincorporaciones tras lesiones ligamentosas a su deporte habitual.
Puede beneficiarse de esta terapia cualquier deportista que se lesione una articulación, un músculo, un tendón, ligamento o incluso el hueso y el cartílago. Hasta hace pocos años creíamos en la incapacidad de regeneración de tejidos como el cartílago y ahora hemos podido comprobar que no es así. Las terapias biológicas como los factores de crecimiento son capaces de regenerar tejidos que no imaginábamos.