Las Mamas Tuberosas
Normalmente es siempre por motivos estéticos. No se ha encontrado ninguna relación entre algún tipo de patología con la Mama Tuberosa
La Mama Tuberosa no es una patología, es sencillamente una alteración de la forma. La incidencia de la herencia es muy poca. Por lo tanto, podemos afirmar con toda propiedad que la Mama Tuberosa no es hereditaria.
¿Qué particularidades anatómicas permiten identificar una Mama Tuberosa (piel, forma, alteraciones internas)?
La Mama Tuberosa es muy fácil de diagnosticar. Tiene forma de tubo, por eso se llama tuberosa. Tiene además unas características peculiares; las areolas suelen ser más grandes, el pezón suele estar descendido, el tejido areolar es denso y el volumen no es normalmente muy grande, son más bien pequeñas.
Por eso, a la hora de corregirlas, tendremos que modelar, hacer sitio y después poner la prótesis.
Intervención Quirúrgica
La intervención normalmente no tiene más molestias que una intervención menor. El riesgo es estético, es decir, que para operarse de una Mama Tuberosa hay que ponerse en muy buenas manos.
Normalmente es siempre por motivos estéticos. No se ha encontrado ninguna relación entre algún tipo de patología con la Mama Tuberosa.
Existen varios grados de deformidad en las Mamas Tuberosas
Grados hay tantos como pacientes porque cada Mama Tuberosa es distinta. Hay que adaptar la intervención exclusivamente a la paciente que se está tratando.
Normalmente no se quita nada, es decir, aunque la areola sea grande se suele dejar así. Se hace una incisión en la propia areola, llegamos detrás de la glándula y relajamos la cápsula que es responsable de que la mama esté constreñida y sea tuberosa. Con esta relajación todo el pecho cede y ya se puede poner un implante con lo cual se corrigen a la vez las dos cosas, la forma y el volumen.