La sobrecarga del cuidador
La mayoría de casos con Sobrecarga de Cuidador son personas que llevan mucho tiempo expuestas a una situación vital estresante de gran intensidad. Se entiende como “cuidador” aquella persona dedicada a atender las necesidades de otra persona y a cuidarle
La Sobrecarga del Cuidador es un estado de tensión y agotamiento, tanto físico como psicológico, que afecta significativamente en el día a día de la persona cuidadora disminuyendo su calidad de vida y perjudicándole tanto a nivel personal como familiar, social y laboral.
Se entiende como “cuidador” aquella persona dedicada a atender las necesidades de otra persona y a cuidarle ya que, debido a cuestiones médicas, es dependiente. La mayoría de casos con Sobrecarga de Cuidador son personas que llevan mucho tiempo expuestas a una situación vital estresante de gran intensidad. Ante una situación estresante, el cuerpo humano se prepara para enfrentarse a la situación y por ello la persona tiene fuerza. Si esta situación perdura, llega un momento que se puede producir un “vaciamiento” de las defensas a nivel psicosomático, entrando en la fase de agotamiento. Esto es lo que se conoce como sobrecarga.
Sobrecarga del Cuidador: síntomas
Los síntomas que presenta un cuidador cuando se encuentra ante una situación de sobrecarga son:
- Agotamiento o disminución de la energía
- Depresión, apatía, desgana y/o lloros frecuentes
- Irritabilidad y/o cambios de humor
- Nerviosismo y/o agitación
- Dificultades con el sueño
- Disminución de las actividades sociales, aislamiento social
- Déficit en la atención, concentración y memoria
- Aumento o pérdida de peso
Cuando se presentan estos síntomas, es conveniente acudir a un profesional de la psicología, preferiblemente un experto en Estrés. El primer paso es identificar los síntomas, reconocer las dificultades, entender que está pasando y por qué ha ocurrido, para así poder analizar el comportamiento y valorar las posibles soluciones.
Es fundamental conocer y entrenar herramientas de gestión emocional y aprender estrategias para idear un plan de acción y llevarlo a cabo.
Consecuencias de la Sobrecarga del Cuidador
Las repercusiones de esta sobrecarga tiene consecuencias físicas y mentales en el cuidador. Desde problemas leves como Ansiedad o Trastornos Psicosomáticos a problemas más graves que repercuten en la situación económica, laboral y social.
Es importante resaltar que la Sobrecarga del Cuidador puede repercutir en los cuidados que esta persona proporciona al enfermo, afectando a éste directamente ya que se pueden dar situaciones de abandono del cuidado llegando al maltrato y abuso hacia la persona dependiente.
Consejos para la persona cuidadora
- Pedir ayuda no es un síntoma de debilidad sino lo contrario. No siempre se puede hacer todo solo
- Es necesario dedicarse tiempo todos los días
- Para poder cuidar, primero se ha de cuidar uno mismo
- Realizar una dieta equilibra e intentar que el sueño se altere lo menos posible
- Hacer ejercicio 3 días a la semanas y salir de casa todos los días a dar un paseo
- Delegar tareas a familiares y amigos, es imposible llevar una única persona todo el peso
- Dedicar tiempo al ocio
- No hay que sobreproteger a la persona que se cuida
- Si existen dudas acerca de los cuidados, se debe preguntar al personal sanitario
- Si el cuidador percibe emociones negativas intensas con frecuencia, debe pedir cita con un psicólogo para aprender estrategias de gestión emocional