La buena nutrición y su relación con la salud visual
Los ojos son el principal órgano de los sentidos, nos conecta con el mundo, nos mejora la existencia, nos da la capacidad para la interacción, la productividad, la salud física y mental
Es indispensable para todos los seres humanos mantener una buena alimentación de tal suerte que garanticemos una adecuada salud a todo nivel: Cardiovascular, Metabólica, Gastrointestinal, Cerebral y sobre todo a nivel visual.
Definitivamente se puede aseverar que la alimentación influye de manera directa en la visión. Es así que una dieta rica en vitaminas, minerales, elementos trazas, oligoelementos, ácidos grasos esenciales y antioxidantes, asegura mantener un adecuado equilibrio del metabolismo de la retina, el cristalino, la córnea y demás estructuras del órgano de la visión y, por lo tanto, previene la aparición temprana de problemas como la Catarata, el Glaucoma, los Defectos Refractivos, la Degeneración Macular relacionada con la edad y otras enfermedades.
Maximizamos que el efecto acumulativo debe ser desde temprana edad, por tanto, debemos concientizar a nuestros pacientes desde muy jóvenes a evitar el consumo de sustancias toxicas en la alimentación o lo que llamamos comida chatarra y aumentar en la dieta todos los frutos rojos, verdes y amarillos tanto en verduras, hortalizas y frutas, para potencializar la visión y evitar complicaciones en nuestro sistema visual.
Alimentos para una visión sana
Para la visión, una dieta rica en vitaminas, minerales y sustancias carotenoides y flavonoides, protegen, barren y limpian los radicales libres, pero ¿dónde podemos encontrar estos componentes? A continuación, una lista de alimentos en los que podemos hallarlos y sus beneficios.
- Vitamina A: es necesaria para la visión nocturna, está presente en los alimentos como los lácteos y en los alimentos vegetales. El cuerpo es capaz de transformar los carotenos y, especialmente, el betacaroteno en vitamina A. Los carotenos se encuentran en vegetales de color naranja, rojizo o amarillo como zanahorias, espinacas, batata, berro, albahaca, tomates, espárragos, nísperos, arúgula, melocotones, ciruelas, etc.
- Complejo B: previene la aparición de enfermedades. El ácido fólico, la piridoxina y la Vitamina B12 están relacionados con la prevención de la Degeneración Macular y están presentes en cereales integrales (trigo, avena, cebada), frutos secos (avellanas, almendras, nueces), verduras (coles, coliflores, rábanos, endivia) y en suplementos como la levadura de cerveza
- Vitamina C: es necesaria para la absorción de las vitaminas A y E, así como para fabricar colágeno muy presente, por ejemplo, en el humor vítreo. Además de las propiedades antioxidantes, es adecuada para la absorción del hierro, calcio y los aminoácidos. Se encuentra en pimientos y cítricos (naranjas, limones, pomelos)
- Vitamina E: protege las células de la oxidación mediante la protección de sus ácidos grasos. Puede prevenir la aparición de Cataratas al neutralizar la acción de los radicales libres. Se encuentran en verduras y hortalizas de color verde, así como en vegetales ricos en aceite como lechugas, guisantes, semillas de girasol, nueces o suplementos como el germen de trigo
- Antocianidinas: la labor de estos flavonoides se centra en la reparación de las células nerviosas de la retina, en el aumento del caudal sanguíneo y en la protección del colágeno. Se encuentran en alimentos como los arándanos, frambuesas, cerezas, berenjenas, ciruelas y manzanas
- Zinc: es un mineral antioxidante que protege frente a los daños de los radicales libres. Se encuentra en el apio, espárragos, hígado, borrajas, higos, patatas y berenjenas
- Ácidos Grasos Esenciales: son grasas del grupo Omega 3 y 6, previenen la Degeneración Macular, tienen efectos antiinflamatorios y ayudan a la formación de la vitamina A. El Omega 3 se encuentra en pescado azul, pescados de agua profunda como el robalo, salmón, mero, corvina, tilapia y cereales integrales como nueces y semillas de calabaza. El Omega 6 en aceites de soya, girasol, maíz, frutos secos como almendras, marañón, nueces y maní
Es indispensable recalcar a nuestros pacientes, desde muy pequeños y a sus padres, que mínimo deben incluir de tres a cinco de estos alimentos en su dieta diaria, para lograr disminuir la progresión de los Defectos Refractivos, las Cataratas, la Degeneración Macular relacionada con la edad, el Ojo Seco, la Inflamación Crónica o Síndrome de Superficie Ocular, además de Conjuntivitis, Queratitis, Blefaritis y las combinaciones de estas patologías.
La importancia de la buena alimentación en la salud visual
Debe hacerse una consulta integral, en la cual, se pueda explicar que, si incluimos en nuestra dieta de cuatro a cinco porciones diarias de fruta, verduras y hortalizas, lograremos evitar la aparición de patologías. Así mismo, explicar sobre el consumo de moluscos, cereales, carne de vaca y judías que aportan un porcentaje de zinc muy importante para disminuir la aparición de Degeneración Macular asociada a la edad.
El pescado de aguas profundas como salmón, atún, sardina, mero, corvina y tilapia, contienen un aporte de Omega 3 vital para el organismo, ya que su consumo se ha estudiado que favorece la producción basal de lágrimas, mejorando la parte sebácea de la película lagrimal, por lo tanto, evitando el Ojo Seco y el Síndrome de Inflamación de la Superficie Ocular Secundario.
La aparición de Fotofobia está relacionada con el bajo consumo de vitamina B12; para disminuir esta sensibilidad del ojo frente a la luz, es recomendable incluir en la dieta alimentos de alto valor proteínico como hígado y carnes en general, además de huevos y productos lácteos.
Es muy importante, insistir en que se recomienda evitar un consumo excesivo de azúcares y grasas saturadas, como los dulces y toda la pastelería industrial, ya que afecta el metabolismo aeróbico vascular, disminuyendo la oxigenación de la retina y aumentando el riesgo de Glaucoma y la formación de Catarata. Así como la predisposición para desarrollar Diabetes y los efectos colaterales de dicha enfermedad en los ojos: Catarata y Retinopatía Diabética.
Además, el consumo de sal en altas cantidades afecta toda la parte cardiovascular del individuo, aumentando el riesgo a desarrollar enfermedades cardiovasculares como la Hipertensión Arterial, que es un factor precipitante de la Retinopatía Hipertensiva, la oclusión de vasos centrales o ramas de los mismos, tanto arterias como venas.
Finalmente, es muy importante acompañar la sana alimentación con visitas frecuentes al oftalmólogo, no automedicarse, no frotar o rascar los ojos, utilizar filtros para el computador en lentes adecuados, parpadear frecuentemente, hacer ejercicio aeróbico diario (al menos 1 hora al día) y hacer pausas activas frecuentes.