Infección Urinaria en pacientes pediátricos
Cabe mencionar, que el porcentaje de pacientes con Infección Urinaria es más frecuente en mujeres que en hombres debido a la anatomía
La Infección Urinaria es una de las infecciones bacterianas más recurrentes en Pediatría. Es básicamente la presencia de bacterias en un Uroanálisis o parcial de orina acompañado de presencia de nitritos positivos, leucorrea positiva y células inflamatorias en la orina.
Esto siempre debe ir acompañado de fiebre mayor a 38°C y síntomas como: náuseas, Vómitos, Dolor Abdominal y Diarrea, que son los más comunes en recién nacidos y edad lactante.
En los pacientes escolares y preescolares predominan los síntomas irritativos (frecuencia urinaria, dolor al orinar, presencia de sangre en la orina, orina con mal olor y Dolor Abdominal, principalmente).
Cabe mencionar, que el porcentaje de pacientes con Infección Urinaria es más frecuente en mujeres que en hombres debido a la anatomía, es decir, la uretra es más corta y más cercana a los genitales, además es más frecuente que las mujeres tengan una Disfunción Misional Asociada a una Disfunción del Piso Pélvico.
Sin embargo en los pacientes menores de un año, es más propensa la enfermedad en varones que en mujeres.
Causas y factores de riesgo
El factor de riesgo más importante es la Difusión Misional, es decir, los malos hábitos urinarios.
Lo anterior se describe como los hábitos repetitivos del paciente, es decir, aguantan las ganas de orinar, van con poca frecuencia al baño, no se sientan adecuadamente, no abren bien las piernas, entre otras.
El segundo factor de riesgo es el Estreñimiento. Nosotros evaluamos la consistencia de la popo a través de una escala que se llama Bristol y esa escala tiene siete tipos de de popo y de acuerdo a eso, se evalúa el nivel de Estreñimiento del paciente.
El tercer factor de riesgo son las Anomalías del Tracto Urinario que entumecen el flujo urinario y se da por los reflujos vesícula laterales.
Otro factor de riesgo, se debe a pacientes que hayan tenido instrumentación de su vía urinaria ya sea porque se han hecho algún tipo de examen o cualquier cirugía.
Los pacientes que tienen limpias y renal, es decir, Cálculos en los Riñones, en la Vía Urinaria o en la Vejiga. Y por último, los pacientes que tienen Vejiga Neurogénica, es decir, Defunciones Neurológicas de la Vejiga.
Prevención
Algunos puntos que ayudan a prevenir la Infección en las Vías Urinarias son:
- Mejorar los hábitos urinarios, sea niño o niña, debe ir al baño cada dos horas y no aguantar las ganas de orinar.
- El varón siempre debe orinar de pie y la niña debe sentarse bien en la taza del baño, su colita debe quedar ajustada al piso.
- Abrir bien las piernas, los pies siempre deben estar apoyados y tanto el varón como la mujer, deben terminar de orinar, esperar, contar hasta 20 y volver a orinar.
- Tomar agua de acuerdo a la edad
- Hacer popo todos los días y utilizar papel blando y delgado
- Si es un niño lactante, debe tener medidas higiénicas adecuadas, es decir, un cambio frecuente del pañal y lavar constantemente los genitales, sobre todo después de que hacen popo
- Ir al baño antes de dormir y orinar al despertar
Diagnóstico y tratamiento
El diagnóstico siempre se hace a través de un Uroanálisis, dependiendo del resultado, se toma un Urocultivo para confirmar el tipo de bacteria y la sensibilidad que tenga a los antibióticos, eso sumado a la historia clínica.
El tratamiento consiste en recetar antibiótico vía oral, esto depende de las condiciones en que se encuentra el paciente.
Cabe mencionar que si no tratamos a tiempo las Infecciones Urinarias, genera inflamación del riñón, que es lo que nosotros llamamos Nefritis y puede provocar cicatrices en el riñón, que son células que se mueren y no se recuperan.
Los riñones van perdiendo función y pierden proteínas, genera Hipertensión Arterial y Alteraciones de la Función Renal.
Recuerda que es muy importante que los pacientes sean remitidos a Nefrología en el momento indicado, es decir, si ya tuvieron Infecciones Urinarias recurrentes, Disfunciones Misionales que no mejoran a pesar de las recomendaciones, alteraciones en las Ecografías Renales, antecedentes familiares de alguna malformación en la vía urinaria o de reflujo e infecciones urinarias por bacterias que no son típicas o que han sido muy agresivas y resistentes.