Importancia del diagnóstico oportuno y adecuado manejo de la Hipertensión Arterial
Uno de cada cuatro adultos padece de Hipertensión Arterial, por eso, la detección temprana y un apropiado manejo reducen el riesgo que la persona padezca de enfermedades cerebrovasculares y cardiovasculares
La Hipertensión Arterial (HTA) es una enfermedad en la que la sangre circula por las arterias con una fuerza excesiva generando un deterioro progresivo de las paredes de los vasos sanguíneos y de los órganos que las contienen.
Es la principal causa de morbilidad predisponiendo de enfermedad aterosclerótica cardiovascular (Infarto de Miocardio y Falla Cardíaca), Enfermedad Cerebrovascular (Ataque Cerebrovascular / AVC), Falla Renal y mortalidad prematura. Es responsable del 55% de las muertes de origen cardiovascular y del 51% por accidente cerebrovascular.
La prevalencia en Colombia es aproximadamente del 24% sin diferencia en el género, sin embargo, prevalece más en hombres a edad temprana y en mujeres a partir de la adultez media.
Es muy importante saber que su presentación aumenta con la edad siendo del 22% en menores de 50 años y hasta 51% en mayores de esa edad.
Causas y síntomas
Existen factores predisponentes como la carga genética, raza, Sobrepeso y malos hábitos como el consumo de grasas saturadas, Tabaquismo, Alcoholismo y sedentarismo; a lo anterior se suma enfermedades metabólicas como la Diabetes Mellitus y la Hiperlipidemia.
En la mayoría de los casos la HTA no genera síntoma alguno, lo cual no significa que no esté presente la enfermedad o que no se sufran sus consecuencias.
Puede manifiestarse con Dolores de Cabeza, alteraciones en la visión, Mareo o Vértigo, Dolor de Pecho, dificultad para respirar en reposo, cansancio con esfuerzos mínimos y palpitaciones, en casos más graves llega a tener alteraciones neurológicas como disminución o pérdida de la sensibilidad o la fuerza de alguna extremidad o en el rostro, dificultad para hablar e incluso la pérdida de la consciencia.
¿A partir de qué edad se debe tomar la presión arterial?
La presión arterial se debe tomar en cualquier atención médica de un paciente mayor de 18 años sin importar el motivo de consulta. La recomendación actual para chequear la presión arterial cuando no se necesita de atención médica es tomarla al menos una vez al año en los mayores de 40 años.
La recomendación también aplica en sujetos entre los 18 y 40 años con factores de riesgo cardiovascular como adicción al tabaco, Obesidad, Hipercolesterolemia y Diabetes.
Existen varias clasificaciones para diagnosticar Hipertensión Arterial, tanto en el consultorio como en el ámbito ambulatorio. Según la Sociedad Internacional de Hipertensión Arterial (ISH) se diagnostica HTA cuando el valor registrado en el consultorio es mayor a 130/85 mmHg.
En busca del diagnóstico correcto de la Hipertensión Arterial
La medición de la presión arterial de una forma correcta y precisa es fundamental para el análisis y manejo de esta enfermedad. Los escenarios donde se debe tomar la presión arterial son en el consultorio médico o fuera de él (es decir, en el hogar con o sin rutina diaria).
Se recomienda el uso de tensiómetros que utilizan el sistema oscilométrico (digitales, automáticos o semiautomáticos), deben estar calibrados y con la aprobación por la autoridad sanitaria.
Para obtener un dato correcto hay que tener en cuenta el tamaño del brazalete del tensiómetro (acorde con la circunferencia del brazo a nivel del tercio medio), la posición del paciente (sentado en una silla con espaldar, con ambos pies apoyados sobre el suelo, con el brazo sobre una mesa, sin hablar), en un ambiente tranquilo (sin distracciones), con la vejiga vacía y en los 30 minutos previos sin el estímulo de ejercicio, café o cigarrillo.
Además, el brazalete se debe colocar directamente sobre la piel (no sobre la ropa), la presión arterial puede tomarse en cualquiera de los brazos, salvo situaciones puntuales y poco frecuentes como la presencia de fístulas arteriovenosas o infecciones de la piel en el área donde se realiza la medición.
AMPA y MAPA: siglas de vital importancia
Cuando el paciente registra la presión arterial en casa con su tensiómetro digital se denomina AMPA: automedida de la presión arterial. Con esta estrategia se recomienda tomar la presión en la mañana (entre 6 y 8 AM) y en la noche (entre 6 y 8 PM) por lo menos en dos ocasiones con intervalos de 1 a 2 minutos y registrar los resultados en un diario que será revisado por su médico para asegurarse del adecuado control de la enfermedad. Tiene la ventaja que le inculca al paciente mayor conocimiento y compromiso con el cuidado de su enfermedad. Tiene la desventaja que no se realizan registros de la presión arterial fuera de casa ni durante el sueño.
El registro de la presión arterial que se realiza fuera del consultorio y mediante un dispositivo automatizado se denomina MAPA: Monitoreo ambulatorio automático de presión arterial. Consiste en instalar una grabadora especialmente diseñada que se programa para registrar de forma automática la presión arterial con intervalos entre 20 y 30 minutos a lo largo de las siguientes 24 horas. Tiene la ventaja que ofrece mayor cantidad de datos (50 a 60 tomas de presión arterial por día) permitiendo correlacionar el dato con la hora de la toma, medicamentos, actividades rutinarias y durante el sueño.
Tratamiento y prevención de la Hipertensión Arterial
Los objetivos del tratamiento dependen de la edad, de las enfermedades asociadas y del riesgo cardiovascular global del paciente. Siempre debe ser liderado por un médico con experiencia, debe contar con la aceptación del paciente y ser supervisado por el equipo interdisciplinario del programa de riesgo cardiovascular compuesto por enfermería, nutrición, trabajo social y rehabilitación física.
Los tratamientos en todos los casos siempre incluyen la promoción de estilos de vida saludable como el pilar fundamental: actividad física de moderada intensidad mínimo 150 minutos por semana, bajo consumo de sal, abandono del cigarrillo, así como una dieta adecuada rica en frutas y vegetales, evitando las grasas saturadas.
Para el tratamiento farmacológico el médico sigue unos algoritmos de manejo donde se dispone para uso de primera línea medicamentos de la familia IECA/ARA II, diuréticos tiazídicos y calcio antagonistas dihidropiridínicos en presentaciones simples o combinadas según la severidad de la HTA y meta terapeútica a lograr, sin embargo, se debe individualizar cada caso de acuerdo a las comorbilidades del paciente.
El adecuado control de la presión arterial junto con el manejo apropiado de otras enfermedades asociadas (Diabetes, Hipercolesterolemia, entre otras) conlleva a la reducción en el riesgo de presentar un infarto agudo de miocardio, Insuficiencia Cardiaca Congestiva, Insuficiencia Renal Crónica, evento cerebrovascular isquémico (stroke) o hemorrágico y la muerte como consecuencia de estas.