Ginecomastia: qué la causa y qué operación la corrije
Constituye un proceso por el cual la mama en el varón se encuentra aumentada de tamaño, generalmente se produce a expensas de la glándula mamaria o por un aumento en el tejido graso
¿En qué consiste la Ginecomastia?
La Ginecomastia constituye un proceso por el cual la mama en el varón se encuentra aumentada de tamaño. Este aumento de tamaño generalmente se produce a expensas de la glándula mamaria aunque en ocasiones también puede producirse por un aumento del tejido graso.
Producción de este aumento
El aumento en el tamaño de las mamas en el varón puede producirse por múltiples causas aunque lo más frecuente es que sea de naturaleza idiopática, es decir, de causa desconocida. En la mayoría de los varones se produce un aumento del tamaño glandular durante la adolescencia, lo cual acaba desapareciendo unos meses después, pero hasta en un 10% de los varones puede permanecer la glándula mamaria sin involucionar.
En otros casos se puede encontrar también que este aumento en el tamaño de la mama se produce a expensas del tejido graso. Esto puede ser más frecuente en pacientes que han tenido una pérdida importante de peso y cuya grasa ha quedado de manera residual en la mama sin desaparecer concomitantemente con esa pérdida de peso.
También es frecuente observar aumento en el tamaño de las mamas en aquellos varones que han consumido esteroides o anabolizantes para el desarrollo muscular, y que de forma secundaria puede dar lugar al crecimiento de la glándula mamaria. También se ha visto que este crecimiento está relacionado con el consumo de determinados fármacos.
Procedimiento de una operación de Ginecomastia
La intervención de la Ginecomastia va a depender básicamente de qué tejido predominantemente ha aumentado de tamaño en la mama del varón. En los casos en los que los pacientes presenten un aumento de la glándula generalmente se realiza una pequeña incisión en el borde inferior de la areola a través de la cual se realiza la extirpación de la glándula sobrante. En aquellos pacientes donde el predominio del aumento del tejido sea de tipo graso llevaremos a cabo una Liposucción. No obstante, la mayoría de los pacientes presentan un componente mixto en la Ginecomastia, tanto glandular como graso, por lo cual la técnica más utilizada es la técnica combinada de Mastectomía y Liposucción.
Cuando se lleva a cabo únicamente la Liposucción, dicha intervención puede realizarse en régimen ambulatorio mediante anestesia local y sedación. Sin embargo, cuando se lleva a cabo una Glandulectomía, o Mastectomía Subcutánea asociada o no Liposucción es recomendable que la intervención se lleve a cabo bajo anestesia general y al menos con una noche de ingreso. En estos casos se suele colocar un pequeño drenaje en la cavidad residual tras la Glandulectomía que generalmente se retira a las 24 o 48 horas. Y posteriormente en cualquiera de los procedimientos, bien sea de Mastectomía o de Liposucción, el paciente deberá llevar una prenda de presoterapia para favorecer la reabsorción del edema, de la inflamación y un mejor resultado gracias a la retracción de la piel durante aproximadamente un mes.
Pacientes idóneos
Por lo general, el paciente que más se va a beneficiar de este tipo de intervención suele ser un paciente joven cuya capacidad de retracción de la piel está conservada y que podrá obtener unos mejores resultados tanto por la Mastectomía Subcutánea como por la Liposucción.
En pacientes que han sufrido una importante pérdida de peso, van a experimentar una notable mejoría en el aspecto de sus mamas pero en muchas ocasiones, algunos procedimientos auxiliares son necesarios para poder obtener un buen resultado ya que esta piel ha perdido capacidad de retracción y en ocasiones es necesario llevar a cabo otro tipo de técnicas que impliquen el remodelado de la mama.