Dolor Lumbar: qué tipos existen

Dolor Lumbar: qué tipos existen

Editado por: TOP DOCTORS® el 19/09/2024

Concientizarnos de la importancia de tener un hábito de ejercicio correcto, de control de peso, de hacer pausas activas en nuestras actividades repetitivas de todos los días, aprender a relajarnos, es muy importante

 

El Dolor Lumbar es una de las afecciones más frecuentes que molestan la actividad diaria del ser humano, se dice que el 85% de las personas en algún momento de la vida tendremos Dolor Lumbar o sea Dolor de la Espalda Baja, que nos afecta para actividades de la vida cotidiana, movernos, desplazarnos y la mayoría de estas afecciones son autolimitadas.

 

Generalmente mejoran en un periodo oscilante que nunca es tan rápido como quisiéramos, pero tampoco es tan eterno, regularmente en los primeros tres meses la mayoría de personas logran controlar la molestia del Dolor de Espalda.

 

 

Qué pasa si el dolor persiste, pues entramos a evaluar cómo afecta la vida del paciente, si es un dolor persistente, si es intermitente, si es más relacionado con los movimientos o con la actividad laboral, y también tenemos que evaluar qué tanto está influido por las situaciones de la vida diaria, como:

  • Preocupaciones
  • Estrés
  • Deudas
  • Relaciones familiares, personales o sociales

 

Causas del Dolor Lumbar

 

Como estaba diciendo, las primeras causas tienen que ver con afecciones mecánicas, me refiero a posturas inadecuadas que repetimos diariamente a través de muchos años y que no las corregimos, y no las corregimos porque no se nos enseña de manera rutinaria o dentro de un proceso educativo o desde el inicio de nuestra vida cómo debemos hacer las cosas de manera correcta.

 

Realmente no somos tan conscientes de la manera correcta de realizar las cosas con nuestro cuerpo y esto va influyendo de manera progresiva con el paso del tiempo, simultáneamente tenemos que agregar que vamos haciendo un desgaste natural de nuestras articulaciones, especialmente la columna que es el eje de nuestro cuerpo se ve mucho más afectada, en la zona lumbar donde se concentra todo el peso corporal se genera aún más dolor.

 

También tenemos las causas degenerativas, en estos casos se van desgastando los discos intervertebrales de los ligamentos y las articulaciones de la columna lo cual provoca que comiencen a inflamarse, obviamente determinado por las posturas que estamos adquiriendo.

 

Tenemos actividades de tipo inflamatorio, estas actividades están relacionadas con enfermedades que se llaman espondiloartropatías, son especialmente deletéreas y muy limitantes en el día, comienzan a afectar no solo la columna sino también otras articulaciones como las caderas, las rodillas, los hombros y entonces es una enfermedad sistémica que afecta muchísimo a los pacientes.

 

Menos frecuentemente tenemos los procesos infecciosos, Están presentes en personas inmunocomprometidas, a veces en pacientes con Diabetes o Enfermedades Inmunológicas, así como pacientes que consumen medicamentos inmunosupresores.

 

El otro tipo que es no tan frecuente es de origen tumoral, pero siempre hay que escuchar muy bien la historia clínica para sospechar, por ejemplo, ese paciente que refiere que acostado tiene un dolor permanente en su columna probablemente ahí haya un componente tumoral a descartar.

 

Hoy en día estamos viendo una patología que no era muy frecuente antes, son las fracturas vertebrales por fragilidad ósea, o sea relacionadas con la Osteoporosis, entonces muchas causas de dolor en personas mayores pueden ser fracturas por fragilidad ósea.

 

Ahí están más o menos contemplados casi todos los orígenes de las patologías que podrían generar dolor de espalda, de ahí la importancia cuando uno consulte de que le ayuden a aclarar qué le está pasando y saber que la mayoría de causas son benignas, los casos más graves son realmente raros.

 

Tratamiento para esta patología

 

El tratamiento va determinado del generador de Dolor Lumbar, como mencionamos en las causas mecánicas relacionadas con cambios generativos en la columna, el manejo es aprender a entenderla, cómo movernos, la ergonomía de nuestro cuerpo, aprender a pararnos, a sentarnos de manera correcta, hacer los cambios de postura de manera correcta y tener el hábito de una rutina de ejercicio correcto todos los días.

 

Es importante tener un hábito de ejercicio que sea entre 30 y 60 minutos diarios, donde complementamos actividades cardiovasculares, estiramientos musculares, tonificación muscular y esto es lo que va ayudando a que tengamos un mejor control del dolor.

 

Cuando tenemos otro tipo de patología en la cual existe un déficit neurológico, por ejemplo, que el paciente tiene Dolor Lumbar y un dolor irradiado de las extremidades, y que este dolor le afecte su capacidad de ambular hay que descartar que no tenga una Hernia de Disco o Estenosis del Canal Vertebral, en estos casos el manejo inicialmente también es realizar Fisioterapia, ejercicios, inclusive podemos hacer infiltraciones o bloqueos a los nervios para disminuir el dolor, pero si a pesar de esto no mejora probablemente este paciente requiere un tratamiento quirúrgico.

 

En el caso de las Fracturas por Fragilidad el tratamiento se basa en utilizar algún soporte externo durante un tiempo mientras consolida la fractura, a veces es prudente hacer un tipo de tratamiento quirúrgico a la vértebra afectada con técnicas de aumentación. En estos casos utilizamos inyección de cemento.

 

Si la causa del dolor es un Tumor, cada Tumor tiene una complejidad para determinar qué vamos a hacer en cada paciente. En los procesos infecciosos, el manejo de la infección es prioritario, el reposo con un soporte externo y el antibiótico con terapia que generalmente va a tomar de tres a doce semanas dependiendo de del germen que esté generando la infección.

 

¿El Dolor Lumbar se puede prevenir?

 

Realmente no hay forma de prevenirlo, nosotros no podemos evitar tener algo de dolor de espalda en nuestra vida, pero con el autocuidado correcto, ejercicios correctos, la parte de ergonomía, las pausas activas en el trabajo, podemos hacer que esta afección de dolor sea muy benigna para nosotros y sea tan benigna que muchas personas pueden tomarla como que no les afecta en nada su vida.

 

Cuando hablamos de prevenir tenemos tema de generar estrategias para minimizar la magnitud de intensidad del dolor, pero es difícil porque nosotros estamos expuestos a cosas que no tenemos control, si tienes que viajar todos los días a tu trabajo por un periodo largo de más de 45 o 60 minutos, es difícil decir que a mí no me va a doler la espalda, en algún momento de la vida comenzará a doler la espalda, o si yo tengo una actividad repetitiva que me genera una sobrecarga en la columna es lo mismo. En la medida que pueda realizar mis pausas activas se podrá minimizar la intensidad del dolor.

 

Concientizarnos de la importancia de tener un hábito de ejercicio correcto, de control de peso, de hacer pausas activas en nuestras actividades repetitivas de todos los días, aprender a relajarnos, es muy importante. El Estrés y la Ansiedad incrementan mucho y amplifican el dolor que se pudiera tener, en la medida que logramos hacer estos cambios nos daremos cuenta que la mayoría de situaciones son benignas y no son de preocupación alarmante.

 

Obviamente, ante un dolor persistente que afecte nuestra capacidad de hacer las cosas, vestirnos caminar, hacer lo que hacemos habitualmente, es mejor consultar a un especialista y que se haga un estudio acorde a los síntomas.

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