Displasia de Cadera en bebés y niños: Diagnóstico temprano y tratamientos efectivos
La Displasia de Cadera es una enfermedad en la que el desarrollo normal de la articulación del fémur y la pelvis se altera, lo cual puede suceder antes o después del nacimiento.
Causas de la Displasia de Cadera
La principal causa de la Displasia de Cadera es un componente genético, por lo que hay mayor probabilidad de presentar la enfermedad en niños con familiares cercanos afectados, como madre, padre o hermanos. Esta condición es más frecuente en niñas.
Factores prenatales y postnatales
- Espacio Intrauterino Reducido: En el último mes de embarazo, la disminución del líquido amniótico puede reducir el espacio intrauterino, desplazando el hueso de la cadera de su posición natural
- Presentación Podálica: La posición del bebé (bebé sentado) durante el embarazo
- Prácticas Postnatales: Limitar la movilidad de los miembros inferiores, como envolver al bebé en mantas, puede contribuir a la Displasia de Cadera
Síntomas en bebés, niños y adultos
La Displasia de Cadera puede variar de una alteración en el desarrollo del acetábulo hasta la perdida de la relación articular, denominada luxación. Esta puede ser:
- Displasia Acetabular: Puede ser asintomática y pasar desapercibida. No hay síntomas específicos, y el desarrollo psicomotor y la marcha pueden ser normales
- Luxación de Cadera: Puede presentar signos clínicos al examen físico, como un clic o chasquido articular, sensación de reducción o luxación, y limitación para la abducción de la cadera.
Otros síntomas que se pueden presentar en niños y adultos son:
- Cojera y Dolor: Durante la marcha, cojera y acortamiento de una extremidad
- Desgaste Articular (Artrosis): En la vida adulta, puede presentarse dolor debido al desgaste articular, siendo el síntoma inicial de una displasia no diagnosticada en la infancia
¿Cómo se diagnostica la Displasia de Cadera?
El diagnóstico temprano de la Displasia de Cadera es fundamental para aumentar el potencial de remodelación de la articulación y el éxito del tratamiento, ya que a menor edad es mayor el potencial de remodelación de la articulación. Es decir, en los primeros tres meses de vida el potencial de remodelación es más grande y aumenta la posibilidad de éxito con un tratamiento temprano.
Métodos de diagnóstico
El diagnóstico de este padecimiento idealmente debe ser realizado por un ortopedista pediátrico con ayuda de:
- Ecografía de Cadera, realizada antes de las 12 semanas de vida
- Examen Físico Completo
- Radiografía de Cadera para confirmar la sospecha de Displasia
El diagnóstico temprano ha demostrado una disminución importante en los procedimientos quirúrgicos que se realizan para mejorar las consecuencias de la Displasia o Luxación de Cadera.
Opciones de tratamiento para la Displasia de Cadera en diferentes etapas de la vida
El tratamiento de Displasia de Cadera depende de la edad del paciente y la magnitud del daño.
En recién nacidos, la Luxación de Cadera puede ser tratada con Férula de Pavlik, un aparato ortopédico que mantiene la cadera en flexión y abducción, reduciendo la luxación. Este aparato debe utilizarse de día y de noche para que los movimientos de la cadera se realicen de manera controlada.
En el caso de bebés mayores de seis meses, se recomienda hacer una reducción cerrada con tenotomía. La cual consiste en un desplazamiento de los huesos a la posición adecuada y mantenimiento con un yeso en espica durante al menos tres meses.
Por otro lado, si la Displasia de Cadera es leve el tratamiento se realiza con Férulas Abductoras (Férula de Milgram), que mantienen la cabeza del fémur en contacto con el fondo acetabular, estimulando la remodelación, inicialmente se debe usar día y noche y a medida que se corrige la displasia, el tiempo de uso disminuye.
Otros tratamientos quirúrgicos que se recomiendan son Reducción Cerrada con Tenotomía, Reducción Abierta o con Osteotomía, utilizados generalmente en diagnósticos tardíos.
Complicaciones de la Displasia de Cadera
Sin diagnóstico y tratamiento temprano, los niños pueden presentar dolor y cojera, y en la vida adulta desarrollar artrosis de cadera. En la vida adulta, la displasia puede dañar el cartílago blando, aumentando la probabilidad de artrosis.
Medidas de prevención para reducir el riesgo de Displasia de Cadera en bebés y niños
Se recomienda realizar una valoración temprana antes de los tres meses de vida con un especialista en Ortopedia Pediátrica. Otras medidas que se pueden seguir para prevenir el riesgo de Displasia de Cadera son:
- Libre Movimiento: Permitir el libre movimiento de las extremidades inferiores del bebé, para un desarrollo normal de la articulación de la cadera
- Cargar al Bebé con las Piernas Abiertas: Para permitir el movimiento libre
- Ejercicios en cada cambio de pañal: Para las extremidades inferiores