Conozca más sobre la Hipertensión Arterial
La morbilidad de la Hipertensión Arterial puede causar daños a órganos vitales como el corazón, riñones, cerebro o retina, sin que el individuo lo detecte a tiempo. Suele acompañarse de comorbilidades o enfermedades asociadas
La Hipertensión Arterial: el enemigo silencioso
La Hipertensión Arterial es llamada de esta forma porque en su origen confluyen múltiples factores desde hereditarios, pasando por ambientales, del estilo de vida y nutricionales, hasta el estado mental.
La enfermedad puede iniciar en cualquier etapa de la vida y puede o no ocasionar síntomas; cuando se manifiesta se puede presentar sensación de mareo, embotamiento, cefaleas diversas (Dolor de Cabeza) o calor facial. No obstante, un alto porcentaje de pacientes no experimenta ninguna sintomatología, por lo cual es una de las enfermedades que tradicionalmente se denomina como “El Enemigo Silencioso”.
Enfermedades Concomitantes
La morbilidad de la Hipertensión Arterial puede causar daños a órganos vitales como el corazón, riñones, cerebro o retina, sin que el individuo lo detecte a tiempo.
La diversidad de presentaciones de la Hipertensión muestra pacientes que sólo presentan esta patología como única manifestación de enfermedad o se acompaña de comorbilidades o enfermedades asociadas como la Obesidad, la Diabetes Mellitus, la Dislipidemia (aumento de Colesterol y Triglicéridos) e Hígado Graso, entre las más frecuentes.
¿Cómo se maneja la Hipertensión Arterial?
Una vez detectada la condición, se inicia un manejo que según la gravedad del caso incluye inicialmente el tratamiento para el Sobrepeso si éste está presente, restricción de la sal y actividad física ajustada a cada caso.
La evaluación debe ser completa mediante exámenes de laboratorio pertinentes, monitoreo ambulatorio de la presión por 24 horas (M.A.P.A) y Electrocardiogramas. Esto es para iniciar la corrección de los eventuales factores de riesgo presentes o enfermedades ya mencionadas.
Además, se determina si se inician o no tratamientos farmacológicos, de los cuales en Colombia existen excelentes grupos de fármacos y se puede elegir entre una gran diversidad según el caso.
Posteriormente, se efectúan revisiones a corto plazo hasta considerar que el paciente está bajo control. Es aconsejable que el paciente se vaya medicado y sea citado a controles por lo menos cada tres meses.