Cáncer de Piel: ¿Quiénes están en mayor riesgo de padecerlo?
El Cáncer de Piel es una enfermedad complicada y grave que consiste en la aparición de células de morfología y función anormales que compromete todos los tejidos de la piel en sus tres capas: epidermis, dermis e hipodermis.
Son diversas las señales de alerta que indican la presencia de Cáncer de Piel, por ejemplo:
- Lesiones ulcerosas que no cicatrizan
- Lesiones de reciente aparición
- Cambios en la asimetría de una lesión
- Bordes irregulares en la piel
- Sangrado espontáneo
Son más propensas a desarrollar Cáncer de Piel aquellas personas con:
- Color de piel claro
- Ojos claros
- Antecedentes familiares
- Pelo rubio o rojizo
Asimismo, las personas mayores de 60 años, pacientes inmunosuprimidos y aquellos que se broncean excesivamente también están en mayor riesgo.
El diagnóstico temprano es crucial, pues facilita el pronóstico de la enfermedad y calidad de vida del paciente con Cáncer de Piel. Se debe prestar atención a áreas menos visibles, como la boca, las uñas y la región anal para detectar anormalidades.
Tipos de Cáncer de Piel
El Carcinoma Basocelular. Este es el Cáncer de Piel más común y rara vez provoca metástasis. Sin embargo, puede ser localmente destructivo. La detección temprana previene secuelas.
El Carcinoma Escamocelular. En su etapa inicial, cuando afecta solo la epidermis, tiene un pronóstico favorable. Sin embargo, si llega a capas más profundas, el pronóstico empeora.
El Melanoma. Aunque menos común, el Melanoma es altamente agresivo y se propaga rápidamente. Detectarlo temprano mejora significativamente las posibilidades de tratamiento, ya que suele provocar metástasis en etapas tempranas.
La rapidez en el inicio del tratamiento es vital para evitar complicaciones graves. La vigilancia constante y el cuidado de la piel son fundamentales para una vida saludable.