Artroscopia de Tobillo
Recomendar un tipo de Artroscopia de Tobillo dependerá de varios factores, la Atroscopia Anterior es recomendable en casos de síndromes de pinzamiento anterior del tobillo o en lesiones osteocondrales
La Artroscopia de Tobillo es la técnica quirúrgica que, al igual que en otras articulaciones del cuerpo humano, se realiza utilizando una óptica que se introduce por una pequeña incisión. Esta incisión se llama portal, y de esta manera se puede ver el interior de la articulación sin necesidad de abrirla, gracias a la óptica o diminuta cámara. Además, a través de otro portal se pueden solucionar múltiples lesiones de la articulación sobre la que estamos trabajando.
En esta técnica, los portales pueden ser de dos tipos: anteriores o posteriores. El tipo de portal con que se desarrolla la Artroscopia de Tobillo, dependerá de si se trate de una Artroscopia Anterior o posterior del tobillo.
Tipos
Recomendar un tipo de Artroscopia de Tobillo dependerá de varios factores. La Atroscopia Anterior es recomendable en casos de síndromes de pinzamiento anterior del tobillo o en Lesiones Osteocondrales. Estas dos lesiones son los casos principales en que está indicada la Artroscopia Anterior.
Por otro lado, la puesta en práctica de la Artroscopia Posterior se llevará a cabo sobre todo en Síndromes de Pinzamiento Posterior, Síndrome del Os Trigonum y Lesiones del Tendón Lexor Largo del dedo gordo.
Beneficios e indicaciones
Los principales beneficios de la Artroscopia de Tobillo respecto a otras técnicas más convencionales, es que las incisiones son mínimas, existen muchos menos riesgos y la recuperación es más temprana. Una vez sometido a la técnica, el paciente debe hacer uso de bastones o muletas durante unos días. Además, la heparina de bajo peso molecular es beneficiosa durante unos días, aunque en la mayoría de los casos se permite carga y movilidad precoz.