Artritis Juvenil: un padecimiento muy común
La Artritis afecta cualquier articulación del cuerpo, siendo principalmente afectadas los miembros inferiores
¿Qué es la Artritis Juvenil?
Es la enfermedad reumática crónica más frecuente, sus síntomas, como inflamación y compromiso articular pueden aparecer incluso desde el primer año de vida; existen pacientes que van desde este rango de edad hasta que pasan a la transición de adultos que, generalmente tienen 18 años.
La Artritis afecta cualquier articulación del cuerpo, siendo principalmente afectadas los miembros inferiores, normalmente hay pacientes que tienen molestias en rodillas y en tobillos, pero también existen pacientes con un malestar importante en la articulación temporomandibular en la columna cervical, así que, cualquier molestia, dolor o inflamación articular crónica puede corresponder a una Artritis Juvenil.
¿Cómo afecta la calidad de vida?
Los pacientes con Artritis Juvenil tienen una calidad de vida impactada de forma importante, porque los pacientes cuando están enfermos, dejan de asistir al colegio, de hacer actividades sociales, se restringen a las actividades deportivas y empiezan a tener un aislamiento tanto socia, educativo como deportivo. El impacto de la calidad de vida en los niños que tienen la enfermedad y no es tratada adecuadamente, genera uno una repercusión importante en su desarrollo y en su bienestar.
Para los Reumatólogos es muy importante la evaluación clínica del paciente, ante una sospecha de una Artritis, cualquier dolor articular o molestia es importante acudir a cita. El paciente en primera instancia tiene que llegar a manos del especialista y así empezar a tomar decisiones de:
- Exámenes de sangre de Laboratorios que se le toma a los niños
- Se toman algunas imágenes sofisticadas
- Resonancia
Todo va de acuerdo al grado de compromiso que se vea en el paciente, pero partiendo de que la evaluación clínica es lo más importante.
¿En qué consiste el tratamiento?
El desarrollo de la medicina ha llevado que se tengan más opciones terapéuticas, se utilizan medicamentos que son antiinflamatorios de primera línea, medicamentos inmunosupresores y también se utilizan terapias biológicas que son medicamentos que intervienen sobre la respuesta inflamatoria del cuerpo, todo esto ya evaluados y en estudios que se han hecho alrededor del mundo en pacientes pediátricos. Se tiene una seguridad y una efectividad en estos medicamentos para usarlos tranquilamente en la población de niños.
Lo que se busca es que los pacientes no tengan inflamación, algunos pueden llegar a una inflamación mínima, pero el objetivo final es que cada paciente retorne a esa calidad de vida que tenían previo al inicio de la enfermedad.