Ansiedad: ¿Cómo identificarla y enfrentarla?
Estos trastornos afectan la vida diaria de las personas y son recurrentes en la práctica psicológica.
Tratamiento de la Ansiedad
La Ansiedad, considerada una patología o enfermedad, se manifiesta de manera exagerada en respuesta a la emoción primaria del miedo. El miedo, un mecanismo natural de alerta y defensa en nuestro organismo, se activa en situaciones de peligro, sin embargo, la Ansiedad surge cuando este miedo es exacerbado e irracional frente a situaciones cotidianas sin riesgo real para la vida.
Los trastornos de Ansiedad más comunes incluyen:
- Trastorno de Ansiedad Generalizada
- Fobias Específicas o Generalizadas
Estos trastornos afectan la vida diaria de las personas y son recurrentes en la práctica psicológica.
Herramientas de evaluación y diagnóstico
En la evaluación inicial, se emplea una entrevista semiestructurada para comprender la experiencia del paciente, a partir de un manual de diagnóstico, se realizan preguntas específicas sobre síntomas como miedo constante, aceleración del corazón o fobias, además, se utilizan pruebas psicotécnicas para medir diferentes trastornos y determinar su nivel y duración.
Plan de trabajo personalizado
Con la información recopilada, se crea un plan de trabajo personalizado, este plan implica la observación continua del paciente y un seguimiento evolutivo de su sintomatología. En el caso de niños, se considera su entorno escolar y familiar, mientras que en adultos se enfoca en la verbalización del paciente.
Cuando se requiera, se colabora con Psiquiatras y Psicólogos para evaluar la necesidad de medicación. El seguimiento incluye la observación de la respuesta al tratamiento y la posible reducción de medicamentos. La verbalización del paciente sobre su día a día y la aplicación de técnicas aprendidas en terapia guían la evaluación de su progreso.
La evolución del paciente se sigue de cerca, evaluando la aplicación de técnicas aprendidas y la gestión de situaciones cotidianas. El alta se concede cuando se observa que el paciente maneja satisfactoriamente los síntomas iniciales y ha experimentado una mejora significativa en su calidad de vida. Este enfoque integral garantiza un tratamiento efectivo y personalizado para cada individuo.