Alimentos para la memoria
La memoria debe ejercitarse continuamente para mantenerla en buen estado, es muy común tener olvidos puntuales, una cita, una fecha o un suceso, estos suelen ser producto de cansancio, el estrés cotidiano y también a un déficit en el consumo de ciertas sustancias que ayudan a nutrir al cerebro y por lo consiguiente a la memoria
Consulta primero a un nutriólogo
Es importante llevar una dieta equilibrada para nutrir a nuestro cerebro. En general, una dieta variada, que incluya alimentos frescos, frutas, verduras y legumbres, nos aportará los nutrientes esenciales para proteger y tonificar nuestro sistema nervioso central. La consulta con un experto en temas es importante para mantener en buen estado nuestro cuerpo.
Alimentos que ayudan a la memoria
El atún, salmón, robalo, mero, sardinas, etc., son fuente importante de ácidos grasos Omega 3 que protegen y favorecen la formación de los cuerpos y axones (colas) de las neuronas. Por lo que se favorece el flujo de información entre ellas, esto contribuiría a la buena memoria. El Cerebro es 60% materia grasa, y sin “grasas buenas” no puede transmitir impulsos eléctricos de buena calidad.
Los alimentos de origen marino son fuente de calcio (transporte de impulsos nerviosos), fosforo: de este depende por ejemplo el estar atento y tomar rápidamente las decisiones, hierro (facilita el transporte de oxigeno neuronal, tenerlo bajo da cansancio) y otras vitaminas como la E (esta evita la oxidación que la grasa saturada produce, la cual es totalmente deletérea en la memoria).
El huevo, una excelente fuente de proteína
En el huevo también podemos encontrar Lecitina, que favorece la producción de Fosfatidilcolina y esta de Acetilcolina, sustancia indispensable para la transmisión de señales electroquímica al interior del cerebro lo que contribuye a la atención y memoria. Además, tiene antioxidantes lo que previene la neurodegeneración.
Dónde encontrar el Omega 3 y otras vitaminas que ayudan a la memoria
Las nueces son fuente de Omega 3 y 6 (neuroprotectores), Vitamina E, Fósforo (este es fundamental en la capacidad de toma de decisiones rápidas, por ejemplo); pero sobre todo de Vitamina B6 la cual es indispensable para la formación de un neurotransmisor muy importante: Serotonina, el cual nos permite pensar con calma las cosas (pensar antes de actuar).
El aceite de oliva es una excelente fuente de Omegas, tiene antioxidantes, polifenoles y Vitamina E, que son el “escudo protector” de las neuronas, brindan protección contra la pérdida de la memoria y de la acción de los radicales libres (sustancias oxidativas para el cuerpo).
Las vitaminas en los frutos rojos y cereales
Las fresas tienen “Fisetina” que es un antioxidante que mejora la supervivencia neuronal lo cual ayuda a la memoria de largo plazo. Las moras y arándanos tienen “Antocianinas” que son excelentes antioxidantes, Potasio que favorecen la generación y transmisión del impulso nervioso lo cual mejora la concentración y vitamina C que facilita la formación de neurotransmisores y tiene un poder magnifico para mejorar el cansancio y aportar vitalidad, energía y tono.
La avena tiene Vitamina B1, su carencia produce irritabilidad y cansancio precoz, cuando se trabaja, lee o se requiere concentración por largas horas. B1 es la vitamina “antiestrés” por excelencia. La Avenina es un alcaloide relajante.
Mantener hidratado el cerebro es también importante
La deshidratación del cerebro disminuye el volumen sanguíneo, reduce agua en el interior de las células, a lo que las neuronas son especialmente sensibles, no ingerir una buena cantidad de agua durante el día puede causar descenso en el rendimiento físico y puede afectar la capacidad de concentración.
Otras recomendaciones para cuidar la memoria
Los tomates, berenjenas, aguacates, dátiles, semillas de girasol y de calabaza, marañones también contienen sustancias que ayudan a la memoria. Se evitar el consumo de azúcar, gaseosas, alcohol, grasa saturada y carbohidratos refinados si queremos rendir intelectualmente.