Ácido hialurónico, no es sólo rellenar arrugas
El Ácido Hialurónico (AH) es una sustancia con múltiples bondades en el tratamiento del Rejuvenecimiento Facial
El envejecimiento es un proceso biológico de cambios estructurales y funcionales con el paso del tiempo. La genética y el estilo de vida de cada individuo son factores que aceleran o retardan este proceso.
En la actualidad se ha evolucionado en procedimientos seguros para el tratamiento del envejecimiento como la aplicación de Ácido Hialurónico (AH), una sustancia que se encuentra de forma natural en numerosos tejidos y órganos del cuerpo humano. Una de sus propiedades es la de retener agua manteniendo la hidratación de los tejidos. Actualmente se dispone de muchos productos que contienen AH biocompatible y cuya función es penetrar la piel, estimular mayor producción de AH propio y favorecer la formación de colágeno.
Calidad de la piel
Cuando se administra AH directamente en la piel se mejoran la hidratación, elasticidad, líneas finas y poros dilatados. El AH se combina con el agua de la dermis aportando mayor hidratación, estimula y activa a los fibroblastos aumentando la producción de colágeno, incluso en personas de edad avanzada.
Relleno facial
El AH también es utilizado para eliminar arrugas y surcos profundos en la cara y/o dar volumen en surcos nasogenianos; pliegues peribucales y comisuras labiales; arrugas frontales y del entrecejo; surcos nasolacrimales; o bien, para voluminizar labio superior y/o inferior.
Contorno facial
El AH tiene amplia utilidad para la restauración del contorno facial, áreas como las regiones temporales, las cejas, remodelación del dorso nasal, de los ángulos y márgenes mandibulares.
El AH es una sustancia con múltiples bondades en el tratamiento del Rejuvenecimiento de la cara, cuello, escote y manos, entre otras áreas. Como toda técnica inyectable de rejuvenecimiento debe realizarse por un médico entrenado, quien realiza una valoración conjunta de las estructuras faciales y propone un plan individualizado.